Bocaditos de sabor, esponjosos y aromáticos, perfectos para acompañar un té o un café.
Las madeleines son unas pequeñas madalenas típicas de Francia que se caracterizan por su forma de concha y un agradable sabor a mantequilla tan común en la cocina francesa.
Para hacerlas es necesario un molde adecuado que podemos encontrar en cualquier tienda de moldes de repostería.
Ingredientes
- 4 huevos
- 160 gr. de azúcar
- 180 gr. de harina
- 1 sobre de levadura Royal
- 50 gr. de miel
- 180 gr. de mantequilla
- Ralladura de 1 limón
- Azúcar glas para la terminación
Preparación
Derretimos la mantequilla a fuego lento o en el micro a intervalos de 20 segundos.
Batimos los huevos con el azúcar a velocidad alta hasta que blanqueen y aumenten de tamaño.
Añadimos la miel y seguimos batiendo a velocidad alta.
También añadimos la ralladura de limón.
Bajamos la velocidad e incorporamos la harina tamizada con la levadura.
Finalmente añadimos la mantequilla y mezclamos hasta integrar.
Refrigeramos la masa durante, al menos, 2 horas.
Pasado el tiempo de refrigeración, engrasamos y enharinamos las cavidades del molde de las madeleines y vertemos una pequeña cantidad de masa en cada hueco. No debe sobrepasar 3/4 partes de su capacidad.
Horneamos, en horno precalentado a 200°, durante 10-12 minutos, hasta que se vean doraditas.
Refrigeramos la masa sobrante hasta que volvamos a disponer del molde y repetimos la operación.
Si tenemos más de un molde será un proceso más rápido ya que no tenemos que esperar a desmoldar para volver a hornear.
Para desmoldar las madeleines es conveniente dejar que se templen ligeramente.
Y una pizca de cariño.
Xiana.
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